La palabra “crédito” tiene raíces en el latín. Proviene del término creditum, que significa “lo que se confía” o “préstamo”. Este deriva a su vez de credere, que significa “creer” o “confiar”. Por lo tanto, el concepto original está relacionado con la idea de confiar en alguien para que cumpla con una obligación, como devolver un préstamo.
A medida que las sociedades evolucionaron, el término empezó a utilizarse específicamente en el ámbito financiero y comercial para referirse al acto de ofrecer bienes, servicios o dinero basado en la confianza de que se reembolsará en el futuro.
¿Qué es un crédito bancario?
- En la actualidad, el crédito de los bancos es una extensión moderna del concepto que surgió en la antigüedad. Hoy en día, los bancos ofrecen una amplia variedad de productos crediticios, como préstamos personales, hipotecas, líneas de crédito y tarjetas de crédito, que ayudan a financiar desde necesidades básicas hasta grandes inversiones.
Crédito y préstamo ¿es lo mismo?
Es común usar los términos “crédito” y “préstamo” como sinónimos, pero ¿son realmente lo mismo? Aunque están relacionados, tienen diferencias clave. Por ejemplo, un crédito está mayormente vinculado a líneas de crédito hipotecarias o a operaciones relacionadas con inmuebles. En cambio, un préstamo puede adaptarse a un sinfín de objetivos y necesidades.
Las líneas de crédito funcionan de manera flexible: puedes retirar dinero según lo vayas necesitando, lo cual es ideal para proyectos que requieren compras graduales, como adquirir materiales de construcción para una vivienda o negocio. Por otro lado, los préstamos se entregan de una sola vez, permitiéndote administrar el dinero como mejor te parezca. En ambos casos, el acuerdo es claro: recibes una suma de dinero con la condición de devolverlo bajo los términos y condiciones establecidos previamente.
Ventajas y desventajas de solicitar un crédito o un préstamo
Cuando te encuentras ante un gasto inesperado, como un imprevisto de salud, la boda de tus sueños, o la necesidad de reparar tu hogar, un préstamo personal puede ser la herramienta que necesitas para salir adelante. Si planificas bien su uso, este crédito personal puede encajar perfectamente en tu presupuesto sin comprometer tu estabilidad financiera.
¿Cuándo es el momento adecuado para pedir un crédito?
La respuesta dependerá de tu situación personal. Si necesitas una cantidad específica para gastos urgentes, como problemas de salud, remodelaciones en tu hogar, o para iniciar un pequeño negocio, entonces podrías considerar que un crédito es la solución ideal.
¿Para qué sirve pedir un crédito?
Solicitar un crédito puede generar dudas, y es totalmente normal. Por eso, aquí te compartimos algunas ventajas para que te sientas más seguro en caso de optar por esta solución:
- Solventar gastos esenciales: Puedes cubrir pagos como el colegio de tus hijos, comprar útiles escolares o llenar la despensa.
- Adaptabilidad: Tienes la opción de elegir un crédito ajustado a tus posibilidades, con un plan que se adapte a tu capacidad económica.
- Versatilidad: Un crédito puede atender múltiples necesidades: desde gastos médicos, pagos de tarjetas de crédito, hasta impulsar tu negocio o adquirir herramientas como una computadora.
Sin embargo, también es importante tener en cuenta algunas desventajas:
- Hay instituciones financieras que establecen plazos de pago extensos que pueden sentirse interminables.
- Algunas microfinancieras exigen un historial crediticio impecable, lo cual puede ser un obstáculo.
- No siempre se otorga la cantidad exacta que necesitas en el momento requerido, especialmente en algunas microfinancieras.
¿Por qué considerar Presto+ para tus necesidades financieras?
En Presto+ creemos en acompañarte en momentos importantes de tu vida. Entendemos que pedir un préstamo no es sólo una decisión financiera, sino también un paso hacia tus metas y tranquilidad. Por eso, ofrecemos opciones que se adaptan a tus necesidades, con montos flexibles que van desde los 5,000 hasta los 250,000 Lps.
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